La cronología revela hasta qué punto el desarrollo de la infraestructura vial suele verse ensombrecido por especulaciones de distinto tipo.

La obra planteada por el Gobierno de Mendoza, a través de Vialidad Provincial, diseñada para comunicar el corredor del Oeste con el acceso sur a través de calle Juan José Paso en Luján de Cuyo, no es una excepción.

La necesidad de agilizar el tránsito y otorgar una alternativa superadora a la comunicación entre Las Heras, ciudad capital y Godoy Cruz con Luján de Cuyo y Maipú, no es nueva.

Desde 1974 y durante 1976 comenzaron a afectarse las propiedades ubicadas en la traza definida para desarrollar el enlace en cuestión, es decir, establecer una vía para comunicar la Ruta Panamericana con el acceso sur, el cual en aquellos años estaba planteado y comenzó a materializarse en 1978.

Sin embargo, aquel primer intento por desarrollar esa conexión quedó paralizado por una serie de intereses particulares.

Recién a finales de los años 90, ya con un crecimiento notable del área metropolitana, se retomó el proyecto planteando una conexión más amplia capaz de absorber los crecientes caudales de tránsito.

Mientras tanto en 2002, el terreno donde hoy se ubica la bodega Dos Familias fue comprado al ex grupo Greco, una operación donde el nuevo propietario conocía fehacientemente que una parte de la superficie que adquiría estaba afectada a la mencionada obra.

Y fue a partir de 2010, luego de efectuarse al propietario el depósito judicial (tal como lo establece la Ley de Expropiaciones de la Provincia), cuando comenzó el mayor laberinto legal al que se viera sometida la esperada obra.

El titular de la bodega impulsó todos los recursos administrativos y judiciales para impedir que Vialidad Provincial pudiera desarrollar los trabajos de acuerdo al diseño previsto, el cual afecta sólo a una parte del predio que es justamente la construcción de adobe -actualmente en total estado de abandono- visible desde calle Juan José Paso.

Finalmente, la Suprema Corte de Justicia local rechazó cada uno de los planteos del titular de la bodega, incluso manifestando que el lugar en cuestión carece de valor histórico patrimonial.

Con lo cual, luego de siete años de litigio, la Dirección Provincial de Vialidad pudo tomar posesión del predio (2093 m2), por donde transcurrirá la calle lateral Norte del futuro enlace.

Curiosamente y mientras esta instancia se acercaba, una serie de crónicas mediáticas intentaron sensibilizar a la sociedad mostrando a Vialidad Provincial como el organismo responsable de “destruir una bodega histórica de Mendoza”, entre otros argumentos.

Por el momento, el organismo vial ha otorgado a la bodega un tiempo prudencial para que el establecimiento pueda reordenar las operaciones que realizaba en el sector que, tal como lo confirmó la Justicia, pertenece al Estado Provincial.

LA FUTURA OBRA

El proyecto diseñado por Vialidad Provincial comprende la construcción de una avenida con un espacio verde intermedio de importantes dimensiones, la construcción de calles laterales y rotondas reguladoras del tránsito, además de ciclovías y nueva señalización en todo el sector.

De esta manera, la obra tiene como objetivo agilizar y brindar un nuevo brazo conector entre el Este y el Oeste del área metropolitana, generando la descongestión de tránsito que actualmente se desplaza internamente por los barrios ubicados en la zona de Vistalba, Chacras de Coria y Carrodilla (uno de los distritos que mayor desarrollo urbano ha experimentado en Luján de Cuyo en los últimos años).

Pero sin duda, un aspecto central dentro de este proceso, es el relativo a los fondos para desarrollar los trabajos que en este caso se gestionan ante el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

La entidad establece como condición para aprobar el financiamiento, que todo el proyecto debe estar en posesión del Estado Provincial, sin excepciones. 

Así las cosas, una de las obras de infraestructura vial más necesarias para el gran Mendoza, planteada hace más de 40 años, acaba de ingresar en una nueva y definitoria etapa.